jueves, 21 de febrero de 2013

Glosario de MICROMACHISMO


Micromachismo- El psicólogo Luis Bonino (1995, 1996) propone el concepto de micromachismo para referirse a aquellas conductas sutiles y cotidianas que constituyen estrategias de control y microviolencias que atentan contra la autonomía personal de las mujeres y que suelen ser invisibles o, incluso, estar perfectamente legitimadas por el entorno social. Se refiere, por tanto, a las prácticas de dominación masculina en la vida cotidiana.
Violencia domestica: es un tipo de abuso. Implica lastimar a alguien, por lo general un cónyuge o una pareja, pero también puede ser un padre, un hijo u otro familiar. La violencia doméstica es un problema muy serio. Es una causa común de lesiones. Las víctimas pueden sufrir lesiones físicas, como hematomas o fracturas óseas. Pueden sufrir emocionalmente de depresión, ansiedad o aislamiento social.

Feminismo: es un neologismo que identifica como movimiento social la lucha por la igualdad que se venía articulando desde antes de la creación, a finales del siglo XIX, del vocablo. El término se creó en Francia y fue traducido al inglés -feminismo- con un sentido despectivo por los oponentes que pretendieron desacreditar las propuestas francesas y desactivar el movimiento anglosajón.
 
Identificación proyectiva: alude a un mecanismo de defensa psíquico. Se podría definir extensivamente como sigue: Término introducido por Melanie Klein para designar un mecanismo que se traduce por fantasías en las que el sujeto introduce su propia persona, en su totalidad o en parte, en el interior del objeto para dañarlo, poseerlo y controlarlo.
 
La violencia psicológica: no es una forma de conducta, sino un conjunto heterogéneo de comportamientos, en todos los cuales se produce una forma de agresión psicológica.”   Se puede definir también, que la violencia psicológica es una forma de maltrato, que a diferencia del maltrato físico, este es sutil y más difícil de percibir o detectar. Se manifiesta a través de palabras hirientes, descalificaciones, humillaciones, gritos e insultos.
 
Paternalismo: es un sistema de relaciones sociales y laborales, sostenido por un conjunto de valores, doctrinas, políticas y normas fundadas en una valoración positiva del patriarcado. En un sentido más concreto, el paternalismo es una modalidad del autoritarismo, en la que una persona ejerce el poder sobre otra combinando decisiones arbitrarias e inapelables, con elementos sentimentales y concesiones graciosas. También se puede decir que es una acción de protección a fin de tener aliados ante algún conflicto, como diciendo "yo te "cuido"(como un padre) pero tú me ayudas a mi si tengo un conflicto"(Paternalismo).
 
Victimismo: es la tendencia a considerarse víctima o hacerse pasar por tal.1 Una víctima es quien sufre un daño personalizable por caso fortuito o culpa ajena.2 El victimista se disfraza por tanto de víctima consciente o inconscientemente simulando una agresión o menoscabo inexistente; y/o responsabilizando erróneamente al entorno o a los demás. En Lógica es una retórica demagógica que busca desprestigiar de una forma falaz la argumentación del adversario denotándola como impuesta o autoritaria. Para ello, el sujeto victimista posiciona a su adversario de forma implícita como atacante al adoptar una postura de víctima en el contexto de la discusión.


Imagen impactante



Antonio confunde el amor con posesión ya que siempre quiere que pilar sea solo para él y a pesar de que el asiste a un psicólogo no cambia, además que cuando lo primeros días que asiste al psicólogo pues son pone mucho interés en ello, y cuando empieza a mandar regalos pilar es cuando la mayoría de agresores hacen esto con su supuesto arrepentimiento, muestras de cariños y muchas promesas.Según van aumentando los incidentes violentos, esta fase de arrepentimiento va haciéndose más pequeña. Ésta es una de las causas más fuertes que impiden a las mujeres maltratadas proseguir con sus denuncias o intentos de ellas.

Comentario de la pelicula "Te doi mis ojos"

Esta película aborda el fenómeno de la violencia de género. Por parte de pedro su visión machista es la causante de que no quiera que sea la mujer la que lleve el dinero a casa, que no tenga más vida externa, ni con su familia, ni con sus amigos y eso también es una violencia social.
 Algunas escenas de la película nos ayudan a reflexionar sobre el comportamiento de un maltratador: Cuando se siente humillado para calmar su frustración reacciona contra su mujer y su hijo.
La película te doy mis ojos es un vivo ejemplo de la situación que sufren muchas mujeres, violencia perenne perpetrada por sus maridos; que ellas deben de aceptar por que el sistema, porque la sociedad exige eso.
Muestra uno de los muchos casos de violencia contra la mujer, en una sociedad donde la masculinidad, lo que significa ser hombre, debe caber con ciertas estándares, y la femineidad, o el papel de género tradicional de la mujer, tiene su lugar dentro de la sociedad.
 El problema de Antonio, y de muchas personas dentro de nuestra sociedad patriarcal, es que está confundiendo amor con posesión y poder. Esto le lleva a no dejar que Pilar crezca, ni que se desarrolle como persona. Esta situación se presenta con muchas parejas, donde el amor pasa al control y a deja de tener en cuenta el derecho a una vida digna que tiene la otra persona, aunque dentro de nuestro contexto eso a veces se define como “querer”.
 

martes, 19 de febrero de 2013

resumen La perspectiva de género y la criminología: una relación prolífica

  La perspectiva de género y la criminología: una relación prolífica
Los estudios hoy llamados de Género constituyen una de las innovaciones teóricas y políticas más importantes de la segunda mitad del Siglo XX. Uno de sus aportes más significativos, en mi concepto, ha sido demostrar que los factores económicos, políticos y culturales afectan de manera diferente a varones y mujeres y, sobre todo, que el sesgo androcéntrico había conducido a ignorar a la población femenina asumiendo que sus necesidades eran las mismas que las de los varones.
La perspectiva de género cuestiona los puntos de partida de las ciencias sociales y jurídicas al demostrar el androcentrismo que las aqueja. Según se argumenta, lo masculino ha sido identificado con lo universal, la razón y el saber mientras que lo femenino ocupa el lugar de la falta. En consecuencia, las diferentes disciplinas asumían que las necesidades, intereses y características de los varones eran generalizables para toda la humanidad, y que las particularidades de las mujeres eran señal de su inferioridad o carencia.
La propuesta de la crítica de género sería entonces desmontar el andamiaje de los saberes para reconstruirlos de manera que se visibilice a la mujer y se cuestione la posición de poder de los hombres .
Asimismo, la perspectiva de género ha contribuido a desmontar muchos prejuicios sobre las conductas criminales femeninas y ha llamado la atención sobre la necesidad de tener en cuenta sus especificidades
Los Desvíos de las Mujeres
Hasta la década de los setenta del siglo XX los estudios sobre criminalidad se caracterizaban por su androcentrismo, es decir, generalizaban a partir del modelo masculino. En sentido contrario, las particularidades de las mujeres recibían muy poca atención.
Las escasas investigaciones realizadas durante el siglo XIX y la primera mitad del XX tendían a aplicar teorías biológicas y psicológicas para explicar la criminalidad femenina y resaltaban el hecho de que, en todos los lugares en los que se había estudiado el tema, la participación de los hombres era ampliamente mayoritaria.
Paralelamente, la criminalidad femenina tendía a ser juzgada con mayor dureza que la masculina porque se suponía que las mujeres que caían en estas prácticas iban contra la naturaleza femenina y eran, por tanto, criaturas degradadas. Se asumía que los varones tienen una tendencia natural al desvío y a la violencia que justificaba, o bien prácticas particularmente rudas de represión, o bien una tendencia a ser más tolerantes con ellos bajo la suposición de que la naturaleza masculina los empujaba a transgredir los límites.
Crimen y Patriarcado
Los primeros ensayos señalando que no se tenían en cuenta las particularidades de las mujeres y denunciando los estereotipos que distorsionaban el análisis de la criminalidad femenina aparecieron en la década de los 60´s del siglo XX, cuando el movimiento feminista impulsó la revisión de los sistemas jurídicos y penales porque, según denunciaba, estaban fundados en la exclusión de las mujeres y en la universalidad del modelo masculino.
Desde comienzos de los años 70, la posición desigual de la mujer en la criminología, como víctima o como autora de delitos, pasó a ser objeto de atención por parte de la criminología.
En un primer momento, el concepto de patriarcado fue útil para explicar la experiencia femenina en el sistema judicial y penal y para entender la división de sexo dentro de la ley, los procesos criminales y la vigilancia policial. El sistema legal, advirtieron las feministas, forma parte de la estructura de dominación patriarcal debido a que su organización jerárquica, su formato y su lenguaje están montados sobre el modelo masculino.
En consecuencia, algunas feministas sostenían que las mujeres no podían usar el aparato legal para enfrentar la dominación masculina porque su lenguaje y sus procedimientos estaban saturados de reglas y de creencias patriarcales.
Género y Crimen
El concepto de género buscó superar el riesgo de caer en el esencialismo y en el reduccionismo implícitos en la suposición de que todas las mujeres tienen una problemática similar por el hecho de compartir una subordinación.
Las relaciones de género son también relaciones de dominio y, por lo general, los varones monopolizan las posiciones con mayor poder y prestigio. Los primeros estudios sobre género y crimen sugieren que las mujeres están sujetas a una serie de presiones y premios para aceptar las reglas mientras que los hombres tienen mayores oportunidades de soslayarlas.
En la década de los noventa, los avances en los estudios de género mostraron que se había tendido a asimilar el género a lo femenino y que este sesgo estaba produciendo distorsiones tales como la tendencia a tratar las conductas criminales masculinas sólo en función de la situación de las mujeres y, sobre todo, a poner a los varones en el papel de agresores o culpables de manera sistemática. Se vio entonces la necesidad de conocer mejor la condición de género de los varones, las exigencias que se les plantean para construir su masculinidad y sus riesgos específicos.
Si bien existe una relación estrecha entre género y crimen, eso no significa que existan leyes que la expliquen. Por lo tanto sería aconsejable aplicar el análisis de género a cada situación específica y analizar, de manera situada, el rol que desempeña. A pesar de que no se ha podido cumplir con el plan inicial -generalizar sobre la relación entre género y criminalidad-, los estudios con perspectiva de género han abierto nuevos temas y contribuido enormemente a comprender las conductas criminales de hombres y mujeres.
Las conductas delictivas de las mujeres
Según señalan, los delitos femeninos están directamente relacionados con los papeles atribuidos a la mujer en la vida social. La mujer no aparece pues como sujeto sino como objeto, bien de agresiones o bien de disputa entre varones. Con el fin de corregir estos sesgos, los estudios de género intentan romper con la tendencia a situar a las mujeres como víctimas pasivas para entender cuáles son sus estrategias particulares y sus formas de agencia. Su objetivo es demostrar que las conductas delictivas de las mujeres son racionales y siguen objetivos, y por tanto, es necesario interrogar a las actoras y analizar su posición social.
Los varones controlan la mayor parte de las ocupaciones mientras que las mujeres están limitadas al servicio doméstico, el mercado informal y unos pocos oficios, todos ellos con una retribución muy escasa.
Violencia familiar y sexual
Una de las grandes contribuciones del feminismo ha sido llamar la atención sobre la violencia familiar y sexual. Entre sus constataciones más importantes se encuentra el hecho de que cuando se enfoca la violencia doméstica y el abuso físico y sexual de niños, los hombres son los principales perpetradores.
De hecho, la violencia contra la mujer es tan generalizada que ya no se la percibe como tal sino como una de las tantas incomodidades que las mujeres deben soportar. La proliferación de estudios y programas dirigidos a enfrentar esta problemática impulsó cambios tanto en la manera de tratar la violencia familiar y sexual como en la percepción de las personas. En la actualidad la mayoría de los países ha firmado tratados para combatir la violencia familiar y sexual, y las percepciones de la misma han cambiado notablemente. Las personas tienden a identificarla cada vez más como abuso y se han incrementado significativamente los casos de denuncias
Desde esta perspectiva, la violencia sexual puede ser vista como una forma de «ponerlas en su lugar» (Fuller, 2001b). Así, es posible que los asesinatos de mujeres, que han vuelto tristemente célebre a ciudad Juárez, se relacionen con prácticas dirigidas a penalizar a aquellas que rompen con patrones tradicionales de conducta porque viven solas o asisten a lugares de diversión antes vedados a la población femenina.

Género y Cultura Policial
La cultura policial ha sido a menudo el blanco de las críticas de las investigaciones con enfoque de género.
La cultura de género de los cuerpos policiales ha sido también objeto de análisis y de crítica. En primer lugar, se argumenta que los valores policiales ensalzan la virilidad, el arrojo y el dominio, todos ellos asociados con el síndrome machista. Incluso se ha denunciado que con frecuencia las mujeres policía sufren de discriminación y acoso sexual por parte de sus colegas masculinos.
No obstante, a pesar de que estos rasgos son bastante comunes entre las fuerzas policiales, sería necesario tener en cuenta que las mujeres no son víctimas pasivas de la cultura machista. Es más, se observa que ellas desarrollan diversas estrategias para realizar sus intereses
Lo que podemos concluir es que el género influye en las relaciones del cuerpo policial pero no parece posible asumir que el mismo patrón va a repetirse en todos los casos. La crítica de género puede haber influido en estos ámbitos de modo tal que las mujeres policías pueden ser más conscientes de sus derechos y los varones más abiertos a la crítica

jueves, 7 de febrero de 2013

Genero



GENERO

Conjunto de ideas, creencias y atribuciones sociales construidas en cada cultura en momento histórico, tomando como base la diferencia sexual, a partir de ello se construyen los conceptos de masculinidad y feminidad, los cuales determinan el  comportamiento, las funciones, oportunidades, valoración y las relaciones entre hombres y mujeres. 

Son construcciones socioculturales que pueden modificarse dado que han sido aprendidas.    
Ejemplo: En épocas pasadas sólo los hombres podían heredar en países como China. A las mujeres que pertenecían a determinadas clases sociales sólo se les enseñaba bordado y canto. 
¿Sexo y género son lo mismo?
El sexo está determinado por el cuerpo físico, es decir, son las características biológicas (cuestiones anatómicas, fisiológicas, hormonales y cromosomicas). De esta manera, el sexo se refiere a las diferencias biológicas entre hombre y mujer.
Por otro lado, el género es un concepto que ayuda a comprender como, al hecho de nacer con determinadas características sexuales, se le asigna determinadas actividades, valores, roles y comportamientos, que colocan a unos y otras en posiciones desiguales. Por lo que la diferencia, es que el sexo es biológico y el genero se construye socialmente.
 
¿Cómo se puede aprender a vivir en la desigualdad ?
La sociedad esta organizada de tal forma que todas las personas que la componen, a través de las diferentes instituciones sociales, aprenden a relacionarse de determinadas maneras que aseguran la estabilidad del sistema. En este sentido, son estas instituciones quienes promueven y refuerzan los roles de genero.
· La familia. Es la primera instancia transmisora de valores y costumbres, donde se aprende la dinámica de relación de una pareja, la forma de tratar a niños y niñas, la manera de ejercer el poder económico y la autoridad, las reglas y normas que son diferentes para hombres y mujeres y, el trato entre hermanos o hermanas.
· La escuela. A través de la educación, se aprenden las normas y valores culturales que pasan de una generación a otra, también los contenidos sexistas o discriminatorios, la manera de tratar a niñas y a niños, lo permitidoy lo prohibido.
· La iglesia. A través de las religiones, como conjuntos de creencias y practicas institucionalizadas, se transmiten comportamientos y valores, ajustados a normas basadas en principios morales, que establecen distinciones entre los papeles atribuidos a los hombres y las mujeres.
· Los medios de comunicación. Difunden y mantiene diversos estereotipos. Los hombres aparecen como dueños del espacio publico, como sujetos importantes, exitosos, violentos, aventureros, intrépidos, libres, fuertes y conquistadores. Mientras que las mujeres son representadas como madres, amas de casa, abnegadas, buenas, dulces, etc.
¿Qué se puede hacer?
Cuestión de equidad. Al hablar de equidad, se asumen las diferencias, pero no el valor desigual que comúnmente se les asignan. Equidad es aceptar la diferencia, pero no la desigualdad.
Cambio de actitudes. Una de las dificultades para poder comprender los problemas de genero que se viven cotidianamente es, curiosamente, verlos, ya que se han convertido en algo “normal”, en algo que es parte de la vida misma.
El lenguaje y el género. Es importante analizar de que manera el lenguaje refuerza las relaciones de inequidad entre las personas y la subordinación de las mujeres y el papel protagónico de los hombres.
El cambio de actitudes supone reconocer que la forma de comportarse, las palabras que se utilizan, los sueños y las expectativas de vida, la manera de sentir y relacionarse, entre muchas otras, están cargadas de prejuicios, estereotipos, normas, prohibiciones y valoraciones negativas que limitan el desarrollo integral de las personas.




lunes, 4 de febrero de 2013

VIDEO DE APOLÍNEO Y DIONISEO


Lo Apolíneo y lo Dionisiaco


Lo Apolíneo y lo Dionisiaco
APOLO:
Apolo era uno de los dioses más venerados por los griegos, le erigieron muchos templos y a su oráculo acudían cuando deseaban conocer el futuro o aspectos oscuros de su existencia. Los griegos lo consideraron como el dios de la juventud, la belleza, la poesía y las artes en general.
Según Nietzsche, Apolo además expresaba para los griegos un modo de estar en el mundo: era el dios de la luz, de la claridad y la armonía, frente al mundo de las fuerzas instintivas. Simbolizaba también la norma, el orden, la serenidad, el equilibrio, la moderación, la medida, la forma, la perfección, la racionalidad, la felicidad, lo coherente, lo proporcionado, lo que nos gusta mostrar de nosotros mismos.
Tradicionalmente se interpreta la cultura griega como una cultura apolínea, que presenta una visión ordenada, luminosa y racional de la realidad. Nietzsche es contrario a esta interpretación, pues afirma que es correcta para el mundo griego a partir de Sócrates, pero no para el anterior. Frente a lo apolíneo, los griegos opusieron lo dionisiaco.
DIONISOS:
El dios griego Dionisos (Baco para los romanos) era el dios del vino y las cosechas, de las fiestas precedidas por el exceso, la embriaguez, la música, la danza y la pasión, la orgía, el desenfreno. Era el dios de la vida y la alegría desbordante.
Nietzsche hace una interpretación que va más allá de su significado ordinario y representaba también el mundo de la confusión, la contradicción, la deformidad, el desorden, el caos, el riesgo, la lucha, la noche, el mundo instintivo, la irracionalidad, la vida en sus aspectos oscuros, lo oculto, lo que nunca quiere mostrarse, lo que hay que callar de nosotros mismos. La auténtica grandeza del mundo griego anterior a Sócrates y Platón estribaba en no ocultar esta dimensión de la realidad que expresaron en la tragedia. A través de este género artístico consiguieron armonizar lo apolíneo y lo dionisiaco, las dos dimensiones fundamentales de la realidad sin ocultar ninguna de ellas. Para Nietzsche la tragedia es mucho más que una obra artística, constituye la esencia de la verdadera cultura: la lucha entre la vida (la embriaguez creadora) y su negación (la norma, lo racional).


Modernidad vs Posmodernidad

Vivimos en una época que pasará sin duda a la historia como un puente entre climas culturales diferentes: una transición que está ocurriendo en Occidente mucho más de prisa.
La transformación del mundo en una aldea global pone en contacto realidades socioculturales sensiblemente diferentes, lo que provoca ulteriores conflictos.
Las de modernidad y posmodernidad son dos categorías recapituladoras e interpretativas de la cultura y de la praxis occidentales, esenciales para avanzar en el camino de la problemática ética de nuestro tiempo.
LA MODERNIDAD:
Por modernidad se entiende la civilización occidental como se impone a partir del Renacimiento en adelante y que culmina con la Ilustración del siglo XVIII. Sus características principales han sido el capitalismo, el racionalismo, el individualismo, la civilización urbana, el progreso científico y tecnológico, la secularización.
Son muchas las teorías explicativas de la modernidad; considerada como el fruto de la transición de la sociedad militar a la industrial, del estadio religioso al científico positivo, de la tradición a la racionalidad, de la visión cíclica del mundo a la histórica.
La modernidad es, en consecuencia, más una categoría cualitativa que cronológica: esta es la visión del mundo que ha caracterizado al Occidente moderno en su percepción de la realidad, en la construcción de sus ideales, en su desarrollo teórico, ético, social, político.
La modernidad, se convierte en un concepto filosófico y sociológico, que puede definirse como el proyecto de imponer la razón como norma trascendental a la sociedad. Se trata de un proceso de carácter global -de una realidad distinta a las precedentes etapas históricas- en la que lo económico, lo social, lo político y lo cultural se interrelacionan
La modernidad se caracterizó por la racionalización de la existencia, tanto es así que llegó a hablarse de la razón como si fuera una diosa. Este pensamiento fue marcado por el surgimiento de grandes ensueños sociales, políticos, económicos, culturales, tecnológicos, industriales, etc.
POSMODERIDAD:
Luego de echarles un vistazo a los criterios de varios estudiosos sobre tema, nos queda adentrarnos de algún modo en el mundo de lo que es la postmodernidad y conocer desde su surgimiento hasta cuales son sus características, las de sus protagonistas y sus expresiones. De modo que la postmodernidad surge a partir del momento en que la humanidad empezó a tener conciencia de que ya no era válido el proyectomoderno; está basada en el desencanto. El término postmodernismo admite una era a la que precedió el modernismo. Las distintas corrientes del movimiento postmoderno aparecieron a lo largo del tercio central del siglo XX.
La postmodernidad va a recoger todo el camino creado y pensado por 
el hombre en la época moderna. El fin de la modernidad al parecer es entendido por Lyotard y otros autores como la radicalización o la crítica de los valores superiores de la modernidad y su idea de la verdad. La postmodernidad es el tiempo del yo ("del yo antes que el todos") y del intimismo. Tras la perdida de confianza de los proyectos de transformación de la sociedad, solo cabe concentrar todas las fuerzas en la realización personal. Hoy es posible vivir sin ideales lo importante es conseguir un trabajo adecuado conservarse joven, conservar la salud, etc.
El 
individuo postmoderno conoce que su ambiente es muy complicado y fuerte, el cual no acepta, pero considera que él puede incidir en su mejoramiento; sin embargo, vive su vida disfrutando lo mejor que puede. La individualidad posmodernista le concede mayor relevancia a los sentimientos que a la razón; rechaza los ideales de los modernistas. De ahí que él sólo atienda las concepciones múltiples y contradictorias entre sí. Los postmodernos tienen experiencia de un mundo duro que no aceptan, pero no tienen esperanza de poder mejorarlo. Estos, convencidos de que no existen posibilidades de cambiar la sociedad, han decidido disfrutar al menos del presente con una actitud despreocupada; obedece a lógicas múltiples y contradictorias entre sí. En lugar de un yo común lo que aparece es una pluralidad de personajes.
Las personas posmodernas, sometidas a una avalancha de informaciones y estímulos difíciles de organizar y estructurar, está en un incierto vaivén de ideas, no se aferran a nada, no tienen certezas absolutas, nada le sorprende, y sus opiniones pueden modificarse de un instante a otro. Debido a la falta de confianza en la razón hay una pérdida de preocupación por la realización colectiva, y resalta un 
interés por la realización de uno mismo. Esto se observa en el retorno a lo religioso: hay un "boom" de lo sobrenatural y de las ciencias ocultas (quiromancia, astrología, videncia, cartas astrales, cábalas, etc.).
En la postmodernidad, a diferencia de la modernidad, no hay 
prejuicio en aceptar explicaciones por más irracionales que sean. Además de un retorno de lo irracional, también retorna Dios.

Un 
modelo de sociedad postmodernista sería una conformada por infinidad de microcolectividades heterogéneas entre sí, pero fundamentalmente es caracterizada porque en ella el hombre es producto de un proceso natural de evolución, que puede explicarse mediante la razón científica sin recurrir a fuerzas ajenas a ese proceso y además el proceso de desarrollo evolutivo se desencadena por el mecanismo de lacompetencia y esta genera el progreso no solo de la especie humana en un entorno hostil, en el que sobrevivirá el más fuerte, sino del individuo humano, ya constituido de ese ámbito hostil de la especie de la que forma parte.

El postmodernismo se muestra como  una filosofía de la historia que proclama precisamente el fin de la historia y de la filosofía. El presente se absolutiza y el futuro desaparece llegando a incluso a ser impensado en las nuevas condiciones por lo que la linealidad y la racionalidad de la historia moderna se convierten en inoperantes, junto con la idea de progreso. La historia deja de ser vista como un  proceso unitario y se difumina en múltiples relatos narrados por cada individuo a partir de su propia vivencia y con igual grado de validez.
El ataque a la universalidad se  convierte en proclamación de la diferencia y de la tolerancia como  única vía de mantener  la armonía. El conocimiento no es ya el resultado de una apropiación social que hace el hombre del mundo a través de su interacción con él, sino que es sustituido por conocimientos o saberes individuales igualmente válidos. De esta forma la ciencia desaparece como metarrelato, como conjunto de conocimientos objetivos sobre el  mundo. La verdad deja de tener un carácter social en virtud de la apropiación individual del mundo.
El postmodernismo, en su intento por romper todos los universales enarbolados por la modernidad, termina por convertirse él mismo en una universalización que absolutiza las  diferencias haciendo así imposible pensar en la historia y el progreso social tal y como fueron concebidos anteriormente.
 
Conclusión
Si la modernidad se caracterizó por un entrecruzamiento entre razón,  progreso, historia y humanismo (entendiendo este como la lucha por  la emancipación del hombre), la posmodernidad  por lo que hemos analizado, conduce a que el hombre como ente activo y dinámico de la sociedad pierda su vitalidad y desnaturalice su esencia, es decir, que el posmodernismo llama a la inacción, al quietismo, al estaticismo, estimula el individualismo, el egoísmo, el cambio de paradigmas y la pérdida de valores.